“El alto nivel de exigencia de la UE desincentiva las importaciones de carne de conejo de terceros países”

Esperanza Orellana (Madrid, 1963) es licenciada en Veterinaria por la Universidad Complutense. Desde 2008 ostenta el cargo de Subdirectora General de Productos Ganaderos en el Ministerio de Agricultura, con competencias en producciones y mercados de todos los sectores ganaderos. En los dos últimos años es responsable, además, de la gestión de los acuerdos veterinarios para exportación, así como tiene las competencias en bienestar animal. Con motivo del debate que hay sobre la mesa sobre la futura PAC, conversamos con ella para tratar de dilucidar el futuro que se le presenta al sector cunícola.

Hace mucho que se habla de la reforma de la PAC, pero parece que a los cunicultores no les queda

claro cómo va a influir en su sector. ¿Tiene previs- to la nueva PAC algún tipo de mecanismo de inter- vención para garantizar los precios del conejo?

A lo largo de sus sucesivas reformas, la PAC ha evolucionado orientando sus mecanismos al mercado, dentro de una política general que intenta optimizar los recursos económicos disponibles a la agricultura, así como legitimar las ayudas a la agricultura de cara a la sociedad europea y a los interlocutores del mercado mundial. Esta orientación al mercado hace que no exista un mecanismo destinado a “garantizar los precios”, en ningún sector de la agricultura, como ocurría hace décadas. En la actualidad los mecanismos de gestión de mercado están enfocados fundamentalmente a orientar la oferta a la demanda, actuando en caso de crisis coyunturales de precios, facilitando la puesta en el mercado de excedentes, corrigiendo tendencias estacionales o facilitando las actuaciones conjuntas de organizaciones de productores. En

Marisa Montes ([email protected])

definitiva, son una red de seguridad que sólo funciona en caso de que las relaciones de mercado no discurran con normalidad.

Y esa red de seguridad, ¿cómo se traduciría en la reforma de la PAC?

La nueva PAC pretende mantener esta red de se- guridad, dentro de una mejor orientación de fon- dos, que contempla además una simplificación de mecanismos y un enfoque menos sectorizado que el mantenido hasta la fecha. Esto debe ser una ventaja para aquellos sectores, como el cunícola, a los que perjudicaba su escasa dimen- sión en el panorama agroalimentario europeo, ya que dentro de los mecanismos de mercado abier- tos a todos los sectores estarían automáticamente incluidos. Este es el caso del mecanismo general de gestión de crisis, que permite establecer me- didas de gestión de mercado en forma de ayudas al almacenamiento privado, restituciones a la exportación u otras, en caso de que se produzca una situación de crisis motivada por enfermeda- des animales, crisis de consumo u otras circuns-

Diciembre 2012 cunicultura 27

tancias de mercado. Este instrumento, prometedor en cuanto su alcance, depende no obstante de las condicio- nes de activación (la altura a la que se sitúe la red de seguridad), condiciones que aun están abiertas al debate entre los distintos Estados miembro de la UE.

¿Qué ayudas se contemplan en la nueva PAC para los cunicultores? Se hablaba de ayudas para la

rentabilidad de las explotaciones, ayuda a la in- versión y subvenciones para la comercialización, transformación, agrupaciones, etc.

En lo que respecta a ayudas, la mejor opción del cunicultor es el segundo pilar de la PAC, cuyos fondos gestionan las comunidades autónomas mediante sus respectivos programas de desarrollo rural. Aunque pueden existir variaciones sectoriales, estos programas incluyen medidas como la ayuda a la inversión en explotaciones, que permite mejorar la competitividad de las mismas, así como la gestión medioambiental, reduciendo el coste de aplicación de las normativas comunitarias. También existen ayudas a la incorporación de jóvenes agricultores, jubilación anticipada, formación, transformación de productos o incorporación a regímenes de calidad, etc. Todas estas líneas se mantienen en la propuesta actual de reforma de la PAC.

¿Y algunas nuevas?

La propuesta añade otras medidas que podrían resultar interesantes para el sector: en particu- lar, se ha creado una nueva línea de apoyo a las organizaciones de productores, anteriormente vinculada en exclusiva a las organizaciones de productores de frutas y hortalizas, que contem- pla apoyo a actuaciones en común como adaptar la producción de los miembros a las caracte-

rísticas del mercado, crear es- tructuras comunes de comercia- lización, centralización de ven- tas y suministro a clientes, asu- mir normas comunes de infor- mación de la producción o me- jorar la capacitación profesional de los miembros y emprender programas de investigación y desarrollo.

Finalmente, la propuesta de reforma de la PAC incluye medidas de gestión de crisis, como mutualidades o seguros agra- rios, vinculados a actuaciones en común de organizaciones de productores. Aunque la idea es buena, las condiciones de aplicación que recogen actualmente las propuestas le restan interés entre los productores, ya que contem- plarían un coste demasiado elevado.

¿Hay medidas para establecer algún tipo de con- trol en las importaciones? ¿Qué tipo de aranceles existen en relación a la carne de conejo?

La política comercial de la UE y la PAC son políticas complementarias y dependen altamente la una de la otra, pero no se debaten conjun- tamente. Así, en la reforma de la PAC no va a hablarse de aranceles o de mecanismos de protección en frontera, ya que estos temas se debaten en otros foros, y en particular en el seno de la Organización Mundial de Comercio (OMC). El arancel actual de la carne de conejo, calculado como un porcentaje del valor del producto importado, supone un 6,4% del mismo. No obstante, pese a que la protección en frontera no es alta, la realidad es que hay muy poca importación de carne de conejo de terceros países. Ello se debe a las exigencias sanitarias de la UE, lo que comúnmente se conoce como “arancel sanitario”. Para que un tercer país pueda exportar carne de conejo a la Unión Europea, debe garantizar un nivel de sanitario equivalente al de